Convocan a manifestaciones el lunes por 'presos políticos' de Chiapas

an Cristóbal de las Casas, Chis. Organizaciones y comunidades de la Otra Campaña en Chiapas llamaron a movilizaciones y expresiones públicas en todo el mundo este lunes, y convocó a una movilización ante el palacio de gobierno en Tuxtla Gutiérrez ese día, exigiendo la libertad de los ocho indígenas presos en huelga de hambre desde hace 38 días. Dos más ayunan, y uno, el vocero del grupo, Alberto Patishtán, fue arrancado de la protesta hace dos semanas.
En una carta dirigida al EZLN, a las juntas de buen gobierno, el Congreso Nacional Indígena y la Otra Campaña, cerca de 20 organismos, frentes y comunidades recuerdan que a los presos “les prefabricaron delitos por los cuales están condenados a sentencias extremadamente largas, en ningún momento se respeto su derecho al debido proceso, y junto a otras irregularidades procesales, todos denuncian haber sufrido tortura física como psicológica en casas anónimas que no poseen ningún distintivo y son centros de tortura”.

En tanto, la situación de salud de los huelguistas fue considerada como “muy grave” por el equipo de salud de los presos, que ha intensificado su atención, si bien con muchos impedimentos de las autoridades carcelarias. Los indígenas en protesta ya no se sostienen en pie sin ayuda y “la debilidad es notoria”. Permanecen lúcidos pero con afectación de la memoria y episodios de desorientación.

Están deshidratados, con taquicardia, hipotensión arterial, pulso débil, hipotermia, pérdida de peso de entre 8 y 12 kilogramos, calambres constantes. Algunos tienen indicios de hemorragia interna. Ya no toleran miel ni dulces, y beben sólo uno o dos vasos de agua al día.

Los médicos concluían este viernes que “no existe aún falla orgánica” pero “de mantenerse la situación actual, es de esperarse daños en la función renal que pondrían a los huelguistas en una situación de riesgo inmediato”.

Indican que “es menester la presencia de personal médico que pueda brindar seguimiento diariamente”. Las autoridades del CERSS siguen restringiendo el paso al personal de salud, “lo cual pone en peligro directo la integridad de quienes mantienen la huelga y constituye una violación a los derechos humanos”.